Sin memoria no hay orgullo
La memoria combativa de las personas LGTBI ha existido siempre, la memoria de quien lucha por el derecho a ser. Es la memoria de las represaliadas, de las invisibles, la que dio lugar a la conciencia que se convirtió en colectiva bajo una bandera de igualdad.
Ha sido esa lucha colectiva, la organización, la lucha social, política y de clases, en la calle e instituciones, la que nos ha llevado a conquistar derechos y construir un mundo en igualdad con base en los derechos humanos.